Gestión del Diseño para crear Ideas de Negocio

La gestión del diseño se encarga de llevar a cabo ideas de negocio que se diferencien y aporten valor. Permite organizar el proceso de diseño y desarrollo de productos. Impulsa el crecimiento empresarial por medio de su visión estratégica.

La creatividad aplicada correctamente, evaluada con minuciosidad, gestionada hábilmente e implementada de manera inteligente, es clave.

Clave para el éxito de una empresa. Super clave para la prosperidad de quienes gestionen sus propias vidas, sus propios proyectos.

Con estas palabras el ex jefe del Consejo de Diseño del Reino Unido, Sir George Cox, apoyó la importancia de la Gestión del Diseño. Y no podría estar más de acuerdo.

¿Qué es la gestión de diseño?

La Gestión del Diseño es, en esencia, el conjunto de acciones estratégicas, tácticas y operativas que permiten alcanzar los objetivos en una idea de negocio, en la que el diseño es una actividad medular.

Cuando es así, cuando el diseño es eje en el negocio, está a cargo de desarrollar los medios, de establecer las herramientas y métodos con los que los equipos ejecutarán un plan en la ideación, desarrollo e implementación de propuestas. Obviamente con su componente emocional, porque no hay organización que crea en el diseño que no sea humana.

Una idea de negocio, hoy por hoy, debe aportar valor, ser responsable con la agenda social y medioambiental, sin obviar la calidad de su producto. La Gestión del Diseño permite hacer check en estas demandas, porque aplica una visión sistémica y estratégica.

¿Por qué el diseño para gestionar una idea de negocio?

Porque el diseño, además ser una disciplina analítica y resolutiva, se asocia al humanismo. Tiene la capacidad de crear los medios para conectar emocionalmente la propuesta valor con las personas y eso hace que se potencie, que tenga cabida en la mente y la vida del mercado meta.

Fíjate. La definición de diseño industrial propuesta por WDO entremezcla técnica y humanismo. Procesos, resolución de problemas, innovación, éxito empresarial, calidad de vida y resultados; tangibles (productos) e intangibles (sistemas, servicios y experiencias) en un solo párrafo, condensan las virtudes y retos del diseño. De manera que si una idea de negocio considera generar valor, obviamente el diseño es -la- clave.

Aplica el diseño para crear valor

Viene bien que entusiastas, autónomos, emprendedores y empresarios se relacionen con la idea de la Gestión del Diseño. Ésta es una manera muy eficaz de tener presencia en un mundo llena de propuestas, unas memorable, otras fatales, muchísimas sin ningún aporte, sin sazón.

Además los tiempos actuales nos exigen estrategias que se ajusten a los cambios paradigmáticos que estamos viviendo, las viejas estructuras no se acoplan al ritmo y las exigencias del momento.

Las propuestas de hoy podrán existir y trascender si: aplican mejora continua, innovan, empatizan y conectan con la audiencia. Hay que crear diferenciación, relevancia, responsabilidad, conexión y valor, en lo que se desarrolle.

Por cierto, para complementar recomiendo una lectura sobre las lecciones de uno de los productos con mayor «acogida y llegada» 😏 que ha habido recientemente, el Satisfyer.

La sinergia diseño + empresa, a cualquiera le cae de perla. Cuestión de abrir la mente.

El diseño es mi gestor, nada me falta

Resulta que estoy configurando y dando vida a proyectos propios, después de una etapa de muchísimo aprendizaje -léase como glorias, cagadas y pérdidas-. Aprendizajes por mis andanzas en la academia y el emprendimiento, y cómo no, también por experimentar la migración.

En tal sentido, me es indispensable buscar bienestar a través de ideas de negocios que se moldeen a través de aportes y diferenciación, que generen valor y logren calar. Por fortuna mi profesión, el diseño industrial, proporciona las herramientas para lograrlo, se faja en estar al día, se sobrepone a las condiciones adversas y aúpa la autonomía.

A principio de la década del 2010 estudié el Máster en Diseño, Gestión y Desarrollo de Productos, en la Universidad Politécnica de Valencia, España. Ahí vi con mayor profundidad las capas de la gestión del diseño, un mundo complejo y fascinante:

• La de las estrategias: la visión de la empresa, la Dirección de Diseño.
• La de la táctica: el proceso, la Gerencia de Diseño.
• La operativa: la generadora de contenido, quien diseña.

El diseño se ha convertido en una función importantísima y estratégica para las empresas en continua evolución. Existe una necesidad creciente de conocimientos, habilidades y competencias que faciliten la conceptualización, planificación y gestión del diseño.

Kathryn Best

El diseño industrial y la gestión de ideas y proyectos

El acercamiento que tenemos los diseñadores industriales a la gestión de una idea (o en realidad de muchas) no ha sido fortuito, sino causal.

Muchos profesionales en el área nos hemos dedicado a gestar y gestionar proyectos propios, lo que nos ha acercado al ámbito del emprendimiento. Las actividades y la cultura empresarial no nos son ajenas. La gestión del diseño es nuestro brazo ejecutor.

Los diseñadores industriales solemos proponer, producir y rentabilizar los bienes que creamos. También somos prestadores de servicios y/o generadores de conocimiento.

Por experiencia -y por falta de plazas-, ejercer el diseñado industrial en Latinoamérica requiere un abanico amplio de habilidades, varias relacionadas a la gestión empresarial. No en vano tenemos que profundizar en gestión del diseño.

Somos, además de creadores, comunicadores y productores, gerentes, estrategas, administradores y comercializadores. No con el ánimo de ejercer el trabajo de otros profesionales, fundamentales al formalizar una idea de negocio. Para nada. Sino para entender las dinámicas empresariales.

Es común el ejercicio autónomo en disciplinas u oficios creativos, lo ideal es que esta actividad derive en empresas, y para eso es fundamental saber de diseño, de gestión empresarial, de proyectos.

Diseño y gestión para posicionarse

Posicionarse en un mundo lleno de opciones se logra al generar una propuesta con valor y calidad, a través de un proceso eficiente y aplicando una visión estratégica. Eso te lo permite la Gestión del Diseño.

Repito, una idea de negocio competitiva debe aplicar la diferenciación, ser relevante, coherente y responsable. Por su puesto esto hará que aporte valor y conecte. En consecuencia, se posicionará.

Para estar al día con los cambio, es fundamente que el espíritu de la persona, del grupo o la empresa sea flexible. Así podrán, sin temor al cambio, explorar y proponer.

Hay que estimular la creatividad, el pensamiento crítico, la visión estratégica y sistémica en las personas involucradas. De esta manera el diseño, la gestión y la idea de negocio se forjan juntos, acompasados. De lo contrario el diseño sería otro departamento más y la gestión una hoja de excel sin actualizar.

Apostar por introducir el diseño a la gestión empresarial trae consigo innovación, rentabilidad y aporte.

Ojalá que este vistazo a la Gestión del Diseño despierte tus ganas de juntar el diseño y las ideas de negocio. Si es así échale un ojo a la Guía de Ideas que Quieren ser Hechos.

Si quieres profundizar más en cómo el diseño te echaría la manos, recomiendo tomes apuntes de Kathryn Best, una doña en la materia.

Me despido con esta foto de Luka, mi compañero. La tomé mientras revisaba apuntes para este artículo.